lunes, 17 de octubre de 2016

El verdugo y lo cotidiano

Muy buenas, pues seguimos un poco con "El verdugo" (Luis García Berlanga, 1963). En la parte final de la película vemos el garrote vil.


Pero antes, como un ítem oculto, Berlanga nos muestra una pensión en la que se alojan el verdugo retirado (Pepe Isbert), el nuevo verdugo (Nino Manfredi) y su mujer (Emma Penella). Es un espacio normal y corriente en el que solo hay cosas normales y corrientes.



"Per to the left" Sí, pero antes de eso, este momento es ese en el que no sabes si reír, o llorar. Un portamacetas y una silla, ahí tienes un garrote vil.


Toma ya, la cotidianeidad hecha arma.

Como cotidiano es este otro momento.



Emma Penella quiere comprarle una camisa a su marido, y como éste no sabe cual es su talla, Emma le pregunta a su padre Pepe Isbert (verdugo durante décadas) que se lo dice con solo mirarle al cuello. Da escalofríos y risa a partes iguales.


 Bravo Berlanga (y Azcona, por lo que te toque).

No hay comentarios:

Publicar un comentario