lunes, 17 de octubre de 2016

El verdugo y lo cotidiano

Muy buenas, pues seguimos un poco con "El verdugo" (Luis García Berlanga, 1963). En la parte final de la película vemos el garrote vil.


Pero antes, como un ítem oculto, Berlanga nos muestra una pensión en la que se alojan el verdugo retirado (Pepe Isbert), el nuevo verdugo (Nino Manfredi) y su mujer (Emma Penella). Es un espacio normal y corriente en el que solo hay cosas normales y corrientes.



"Per to the left" Sí, pero antes de eso, este momento es ese en el que no sabes si reír, o llorar. Un portamacetas y una silla, ahí tienes un garrote vil.


Toma ya, la cotidianeidad hecha arma.

Como cotidiano es este otro momento.



Emma Penella quiere comprarle una camisa a su marido, y como éste no sabe cual es su talla, Emma le pregunta a su padre Pepe Isbert (verdugo durante décadas) que se lo dice con solo mirarle al cuello. Da escalofríos y risa a partes iguales.


 Bravo Berlanga (y Azcona, por lo que te toque).

martes, 4 de octubre de 2016

La chaqueta metálica, imágenes iniciales

En esta ocasión vamos a hablar un poco de las imágenes que abren una película. En muchos casos, presentan al personaje o personajes y además suelen dar mucha información sobre la peli.

La película es La chaqueta metálica (Stanley Kubrick, 1987) y empieza así.


En este inicio, vemos como cortan el pelo a los reclutas. Vaya cosa a priori. El pelo, es lo que diferencia a los reclutas, uno tiene el pelo negro, el otro rubio, el otro castaño, más corto, más largo etc... Les singulariza. Eliminando la diversidad, el individuo formará un bloque con otros como él. Por eso es importante que todos parezcan iguales y por eso nunca me alisté en la infantería de marina. Kubrick, desde el primer momento habla sobre la alienación del individuo en el ejército. Sabiendo cómo se desarrolla y termina la parte de la instrucción esa primera secuencia, plácida y con una bonita canción sobre el deber se revela como la primera (de muchas) bofetada al ejército.

Visualmente poderosísimo el pase del cortapelos, porque es como Atila. Desnuda cabezas.

Termina además con un plano del suelo (que es donde termina de darle la idea a la secuencia), en el que metafóricamente se queda lo que fueron. Una especie de holocausto de la diversidad.






lunes, 26 de septiembre de 2016

Los simpsons y la vista subjetiva

En esta entrada vamos a volver al principio. Homer quiere gastarle una broma al decano.





La gran pregunta después de haber visto el video es ¿Ha tenido algo que ver con el cubo? Y la segunda pregunta y la realmente importante ¿Por qué? Veamos solo el fragmento que nos interesa.




Homer dice "no ha tenido nada que ver con el cubo. Nosotros, gracias a los planos que hemos visto, podemos lanzar una hipótesis de si ha tenido o no que ver con el cubo. Pero no gracias a éste



Ni a este otro.



Es éste el que nos da la clave.



Vemos a través de los ojos de Homer y eso nos permite formarnos una opinión. Si solo hubiesemos visto los otros planos no sabríamos qué decir, nos faltaría información. En este sentido, lo que el espectador ve, determina lo que entiende. La posición de la cámara es clave para esto. Ese plano subjetivo (vemos lo que ve Homer) es imprescindible para comprender la dimensión de su frase.
Por cierto, recorre como cien metros fuera de la carretera antes de parar (maizal, campo de baseball y por fin, zanja), así que lo de darle al freno, como que no tiene mucho que ver con el cubo.

sábado, 17 de septiembre de 2016

El verdugo, la boda a oscuras

En esta entrada vamos a ver una secuencia de "El verdugo" (Luis García Berlanga, 1963).
Nino Manfredi va a casarse con la hija (Emma Penella) del verdugo (Pepe Isbert) pero antes de su boda hay otra, de más nivel.




Comienza la secuencia con el final de la boda de los ricos y, mientras empiezan a quitarlo todo, entra la boda de los pobres (nuestros protas). Pero mientras entran, todo el ornamento y el oropel de los ricos va desapareciendo ante sus ojos, incluída la música que empieza a fallar justo cuando entran. Es un momento brutal. Pero a partir de ahí mejora y, en mi opinión, mucho. Cuando por fin los novios y el padre de la novia se acercan al altar para que el cura oficie la boda, les van apagando las velas, dificultando la lectura del párroco y haciendo que todos los personajes se muevan a la luz. Momento super cómico.
 

Aquí, Landa empuja a Pepe, Emma y Nino, porque el cura necesita leer, pero ellos no.


Pero lo mejor es el plano general posterior.


Y aquí es donde termina de poner la carne en el asador. La luz, en la iglesia, es para los santos y no para las personas que se supone se están uniendo en la indisoluble alianza que ante dios... bla bla bla. En resumen, si tienes pasta te ponen las luces, si eres pobre te las quitan, pero solo a ti: las figuras religiosas son lo más importante.

Berlanga demuestra que para los grandes directores saltarse la censura es, a veces, un juego de niños. En este caso arremete contra la iglesia, pero tiene para arrear a todos, como se puede ver en el resto de la peli (y veremos en otra ocasión).

lunes, 12 de septiembre de 2016

El Dorado de Howard Hawks

En esta ocasión nos detendremos en "El Dorado" (Howard Hawks, 1966) y, en vamos a llamarlo, un plano detalle. El sheriff de El Dorado es Robert Mitchum, que se ha tirado a la bebida. Todos lo saben y es algo que le incomoda. Llegan unos pistoleros a la ciudad (tipos duros) y ocurre esto.


Cuando todos se ríen porque no da la talla para ser sheriff, Hawks filma ese chulísimo plano detalle en el que lo importante es lo que no tiene para hacerles frente, la pistola. La cámara se mueve lo justo para ver cómo recibe una botella de whisky (y la estrella). Ha cambiado la pistola por la botella y nos lo cuenta de la manera más clara y cinematográfica posible.



sábado, 3 de septiembre de 2016

El Puente de los Espías de Steven Spielberg

Bueno, pues en esta ocasión toca darle un poco de cera al gran Spielberg.

Spielberg´s Common Places


La peli en cuestión es "El puente de los espías" (Steven Spielberg, 2015). En ella Tom Hanks es más Tom Hanks que nunca. El tipo es un abogado que defiende a un presunto espía ruso en el juicio por espionaje. Y esto no gusta a sus conciudadanos. Mirad con qué displicencia le miran sus vecinos.



Su familia tampoco está muy contenta con esta situación. A continuación, a él le mandan a Alemania para negociar un intercambio con los rusos: yo te devuelvo tu espía y tu me devuelves el mío. Pero estamos en un sitio (Berlín, guerra fría) en el que es complicado pasar del este al oeste. Así que Spielberg nos muestra esto.


Se trata de un momento duro en el que vemos las consecuencias de intentar pasar del lado comunista al capitalista y libre. Hasta aquí todo correcto. Pero claro, tiene que decir algo más, no se puede quedar aquí la cosa. Así que cuando Hanks hace el intercambio, convirtiéndose en un héroe, vuelve a los Estados Unidos y pasa esto.



Pues... Por dónde empezamos: el momento "antes te odiaba porque lo decía el cuarto poder y ahora te amo porque eres un americano de pro".

Antes

Ahora

Le falta el clásico recurso del teletienda: blanco y negro para el antes (defiendes a los comunistas), color para el ahora ("Oh, eres mi héroe").


Vale, lo cierto es que el uso facilón de este recurso tampoco es como para lapidarle: repite la situación, pero el contexto ha cambiado y los personajes también. Pero lo gordo para mí es esto otro. Tenemos esta primera situación


 y luego tenemos esta otra.






¿En serio? ¿Y cuela? ¿Nadie dice "este tío me está vendiendo la moto"? ¿En la europa del este se asesina a la gente que quiere huir pero en Estados Unidos las vallas se utilizan para que los niños jueguen? La peli se desarrolla en los 60 pero está hecha hoy en día.Visto con perspectiva, el último plano de los niños saltando las vallas debería ser un grupo de policías que depuran "reducen" hasta la mínima expresión (o la muerte, lo que ocurra antes) a alguna Rosa Parks que ose saltar una valla que no sea suya. Spielberg se pasa de frenada. Vale que la Europa comunista fue lo peor, pero no me pongas a los Estados Unidos como si fuese el paraíso porque no cuela. Y nos damos cuenta.

Por cierto, cuando se hizo la peli ya existía una valla que separaba los Estados Unidos de México y hay gente como Steven Seagal que ha hecho de la caza al inmigrante un reality show. Parece broma y no lo es. Por eso creo que Spielberg debería ser más duro con las realidades de su país.


martes, 23 de agosto de 2016

Murnau y el sonido mudo

Muy buenas, en esta ocasión vamos a hablar un poco de cómo valiéndose de herramientas puramente cinematográficas, Murnau nos transmite una idea sonora.
"Pero Murnau es cine mudo". "Así de chulo es él".

La peli en cuestión es Der letzte mann (F.W. Murnau, 1924), en ella Emil Jannings trabaja como portero en un hotel. Su hija se casa y a la mañana siguiente los músicos se van y Murnau nos lo muestra así.



El movimiento de cámara narra la música que sale de la trompeta y llega hasta el portero, que hace un gesto en plan sí, me suena, voy a mirarles. Y Murnau hace un plano de ellos vistos desde la casa.

Más adelante en la peli, al portero le degradan a chico del lavabo y en el vecindario se corre la voz así.



Misma idea, sonido que viaja.
Murnau, eres el puto amo. Hace  Crea sonido con el cine mudo, que es como coger mi blackberry curve y hacer una peli en 3D.

lunes, 22 de febrero de 2016

Tarantino y el movimiento de cámara

Muy buenas, aquí estamos de nuevo para continuar profundizando un poco en cómo es eso de hablar con la cámara. La película en cuestión es Jackie Brown (Quentin Tarantino, 1997), en ella Samuel L. Jackson va a recoger a Chris Tucker despues de librarle de la cárcel por un asuntillo de unas armas.



El movimiento de cámara narra. Narra el engaño de Samuel. Tarantino no corta, no subimos en el coche vamos por aquí y por allá y nos despista acerca del destino. La cámara se queda en el sitio donde estaba el coche y se eleva para poder ver el otro lado de la valla. Samuel va a situarse a unos pocos metros del punto inical porque lo que quiere es cargarse a Beaumont (Tucker). Tarantino elige un movimiento que traslada la acción a unos pocos metros de el lugar en el que empezamos para hacer evidente desde el primer momento las malas artes de Samuel y cómo se comportará el resto de la peli.